Por: Luis Litardo
Objeción planteada
"
En estos tiempos de agitación política, bien vale aclarar que nadie es binomio de nadie; binomio son los dos, tal como el prefijo 'bi' lo expresa. Bipolar, bisagra, binocular son ejemplos del caso. Lasso y Borrero forman, ambos, un binomio". (DCA)
Preludio.
Estimado Daniel, No todas las ciencia necesariamente deben tomar las definiciones lingüísticas para su desarrollo, algunas elaboran sus conceptos y definiciones desde la raíz de la palabra, esto debido a que cada ciencia define y conceptualiza de acuerdo con los objetivos que persigue.
Siendo las ciencias políticas una rama de la filosofía, esta toma la definición desde una fuente primaria llamada filología.
Dicho de esta manera, las ciencias llevan un procedimiento, desde la conceptualización y definición, pasan por la etimología y todas ellas extraen como de una fuente de la filología, de acuerdo con sus intereses.
Es pues, la filología la ciencia por excelencia que estudia la raíz de las palabras en todos los campos, desde su nacimiento desarrollo y evolución en el tiempo.
Los binomios
En cuanto a la cuestión planteada desde el punto de vista lingüístico "Los binomios" y la observación que haces al respecto, la misma que me pareció de mucha valía para entrar en un debate sano y profundo sobre lo que a mi particular parecer y de acuerdo a tu observación, se trata de un empleo sino erróneo, si inadecuado del concepto de "binomio" en materia política.
Cómo lo expresé antes, las ciencias políticas, son una ciencia derivada de la filosofía y como tal las conceptualizaciones tienen que ver con la finalidad que persiguen, esto es empleando la raíz de la palabra, el <<nomos>> para esto los asiáticos son más precisos y los Celtas más flexibles, ya que en la filosofía de los pueblos originarios de Asia Oriental, la denominan el Yin y el Yang, y encierran en ella, un binomio en constante pugna, mientras que los Celtas recayeron sobre el trinomio, es decir acogieron la filosofía griega pero dejaron un espacio intermedio para la especulación de una posibilidad desconocida.
Los griegos en su afán por definir todo, consideraron el " nomos" como una forma de presencia activa de un ente insustituible como la rueda en el coche (rueda principal y de emergencia).
Y así en filosofía estudiamos los binomios desde el punto de vista de lo insistituible. Ejmp: noche y día, claro y oscuro, arriba y abajo, etc. Es en este sentido que en política también se emplea los binomios, siendo que no son iguales (ser personal) y la presidencia del gobierno (ente insustituible) que jamás puede caer en acefalia, tal como la noche requiere del día para ser sustituida de tal manera que el tiempo no llegue a su final. (la noche sustituye al día no por ser similar en su forma accidental, sino por estar estrechamente ligada a la prolongación del tiempo)
Por lo que, al no tratarse de similares (en el puesto de gobierno ni en el ser personal) el ente insistituible requiere de un relevo (personal) con las mismas atribuciones del ser personal ausente, cómo el día y la noche que no subsisten al mismo tiempo sino el uno en ausencia de otro.
Y es asi que la conceptualización desde la lingüística o las matemáticas no son aplicadas en materia política.
En materia filosófico político los binomios son similares, solo en el relevo, antes no, y asi que, el presente deja claro, que quien lo sustituye es su binomio.
Conclusión
Por lo que el prefijo "bi" es tomado no desde la lingüística y en el sentido que lo has tomado (dos) sino en la raíz propia de la palabra como <<otro>> y el "nomos" similares <<potencia activa>> (es solo si sustituye)
miércoles, 28 de octubre de 2020
jueves, 8 de octubre de 2020
DEL SALUDO Y LA EDUCACIÓN
Por: Luis Litardo
Discrepo mucho sobre si saludar es sinónimo de educación o si es obligación por educación, o que si todas las personas educadas debe saludar o si la educación se refleja en el saludo... ¡No! Lamentable es decir que ¡No!
El saludo es un mero formalismo de entrada y salida, dicho o expresado de cualquier manera en cualquier cultura. En todas la naciones existe una forma expresiva para la entrada y la salida, eso no constituye en ninguna parte que sea un acto de educación, sino más bien, que sea un acto de adaptación socio cultural.
Lo que si representa educación, es estar firme en la línea del derecho, en el respeto del otro como persona, en toda su integridad.
¿Creen ustedes entonces que es Educación, que suba un sujeto armado al autobús, salude con mucha gentileza y sacando su arma comience a desvalijar a los pasajeros, íntimidandolos y golpeándolos, pero agradeciendo al mismo tiempo a quien no opuso resistencia?
Creo conocer sus respuestas.
De la misma manera, que sujetos inecrupulosos irrumpen el descanso de otros con ruidos extremos e inneserarios pero te saludan de forma cortes y agradable.
Tampoco hay educación allí.
Que sujetos entren en una oficina, edificio o dependencia pública, saludando a todos y al instante escupiendo por doquier, dejen tirados los mocos sin la menor seña de higiene y dejando los rastros de la basura que usó comió o bebió en el sitio.
¡Pues no! Tampoco hay educación allí.
Que personas lleguen tarde a una reunión saludando con voz en pecho interrumpan a quien tiene la palabra.
¡No y no,!
Ninguna de esas personas son educadas ni en ejemplos similares que ustedes pudieran poner.
Tampoco es mal educado el que no saluda, porque no se puede juzgar como norma general lo que corresponde al fuero externo desconociendo el afán interior de la persona.
La norma general respeta la integridad de la persona y no las formas socio culturales.
He visto muchas personas distraídas en las calles víctimas de un sinnúmero de problemas sociales que los distraen totalmente de la atención a los demás y de si mismo.
He visto estudiantes, concentrados en sus exámenes, y no se les pasa por la cabeza siquiera que hay alguien allí.
He visto personas cuasar accidentes porque distrajeron su atención unos segundos.
Y en ninguno de los caso podría decir que estás personas son mal educadas, solo son víctimas de las circunstancias de un momento fugas.
Y así he visto muchas personas que no saludan o no responden al saludo.
Creo que la sociedad debe dejar de estigmatizar a personas solo por un mero formalismo, juzgar por las formas es seguir ahondando en el fortalecimiento de generaciones superficiales dónde importa más la forma que el fondo, dónde la apariencia habré las puertas a la desfachatez, dónde la forma dulce es la llave perfecta para el robo perfecto, donde el crimen lleva impreso un gesto amable.
Juzgar a alguien por si saludó o no saludó, tampoco es un acto de educación, porque el ser educado implica el respeto a la intimidad.
¿Que sabes tú de la vida interior de los demás?
Discrepo mucho sobre si saludar es sinónimo de educación o si es obligación por educación, o que si todas las personas educadas debe saludar o si la educación se refleja en el saludo... ¡No! Lamentable es decir que ¡No!
El saludo es un mero formalismo de entrada y salida, dicho o expresado de cualquier manera en cualquier cultura. En todas la naciones existe una forma expresiva para la entrada y la salida, eso no constituye en ninguna parte que sea un acto de educación, sino más bien, que sea un acto de adaptación socio cultural.
Lo que si representa educación, es estar firme en la línea del derecho, en el respeto del otro como persona, en toda su integridad.
¿Creen ustedes entonces que es Educación, que suba un sujeto armado al autobús, salude con mucha gentileza y sacando su arma comience a desvalijar a los pasajeros, íntimidandolos y golpeándolos, pero agradeciendo al mismo tiempo a quien no opuso resistencia?
Creo conocer sus respuestas.
De la misma manera, que sujetos inecrupulosos irrumpen el descanso de otros con ruidos extremos e inneserarios pero te saludan de forma cortes y agradable.
Tampoco hay educación allí.
Que sujetos entren en una oficina, edificio o dependencia pública, saludando a todos y al instante escupiendo por doquier, dejen tirados los mocos sin la menor seña de higiene y dejando los rastros de la basura que usó comió o bebió en el sitio.
¡Pues no! Tampoco hay educación allí.
Que personas lleguen tarde a una reunión saludando con voz en pecho interrumpan a quien tiene la palabra.
¡No y no,!
Ninguna de esas personas son educadas ni en ejemplos similares que ustedes pudieran poner.
Tampoco es mal educado el que no saluda, porque no se puede juzgar como norma general lo que corresponde al fuero externo desconociendo el afán interior de la persona.
La norma general respeta la integridad de la persona y no las formas socio culturales.
He visto muchas personas distraídas en las calles víctimas de un sinnúmero de problemas sociales que los distraen totalmente de la atención a los demás y de si mismo.
He visto estudiantes, concentrados en sus exámenes, y no se les pasa por la cabeza siquiera que hay alguien allí.
He visto personas cuasar accidentes porque distrajeron su atención unos segundos.
Y en ninguno de los caso podría decir que estás personas son mal educadas, solo son víctimas de las circunstancias de un momento fugas.
Y así he visto muchas personas que no saludan o no responden al saludo.
Creo que la sociedad debe dejar de estigmatizar a personas solo por un mero formalismo, juzgar por las formas es seguir ahondando en el fortalecimiento de generaciones superficiales dónde importa más la forma que el fondo, dónde la apariencia habré las puertas a la desfachatez, dónde la forma dulce es la llave perfecta para el robo perfecto, donde el crimen lleva impreso un gesto amable.
Juzgar a alguien por si saludó o no saludó, tampoco es un acto de educación, porque el ser educado implica el respeto a la intimidad.
¿Que sabes tú de la vida interior de los demás?